lunes, 12 de mayo de 2014

174517 Melpómene


¿De dónde proviene el Conocimiento? Del hacer de importantes tecnócratas, Instituciones y otros entes que legitiman si el conocimiento tiene veracidad o no; o tal vez, sea la Ciencia como métodos y teorías que configuran científicos que leen desde ello realidades; o tal vez, sea la realidad y el vivir en ella la que configure las construcciones sociales y las formas de apelar a las realidades. Personalmente considero que el Conocimiento deviene de sus sociedades y responden a preocupaciones de estas en asuntos diversos; lo que conlleva a todo pensar no solo al trabajo intelectual, sino que estas ideas están ancladas en los contextos. El pensar como practica va más allá del  nivel epistémico a un nivel político-practico. La  carga política y de importancia práctica del conocimiento cambia la relación de las comunidades que atañe, ya que,  no se ve como una forma de aglomerar un conocimiento como un bien de capital simbólico y social, sino, relaciones desiguales y perspectivas múltiples de luchas contantes de las representaciones e imaginarios que traigan la construcción y desnaturalización del conocimiento con cierta carga reflexiva.

 

A mi ojos, tal tipo de conocimiento esta expresado en el  174517 de Primo Levi. En los campos de concentración alemanes se asesinó sistemáticamente a las personas judías, el esplendor del método tuvo lugar en Auschwitz, una compleja ciudadela que desarrollo las formas de extinción de judíos. En 1944 Primo Levi y otros judíos italianos partieron desde sus casas a Auschwitz. A Primo Levi le correspondió la muerte  174517, tatuada en su brazo derecho como una predestinación de su muerte por sus prácticas, ideas y filosofía judía.  174517, 174517, 174517, 174517, 174517, 174517 se ha transformado en el signo por el cual se piensa y se recuerda las atrocidades del exterminio judío por parte del Nacional Socialismo. 174517 se puede leer en los relatos de Primo Levi como sobreviviente del holocausto o en su tumba como epitafio; que aun en la tumba rezumba la macabra sentencia del 174517, el macabro conocimiento de Auschwitz. De aquel número que recibió Primo Levi en los campos de concentración alemanes, no solo Sobrevive la imagen del 174517 tatuado en su Brazo, también sobrevive como símbolo de lo contado de los pocos testigos (en total 20) que sobrevivieron al holocausto.

Es apenas entendible que Primo Levi tomara toda una preocupación y cuidado por lo que tuvo lugar en aquellos días de reclusión; asumiendo toda una preocupación para no olvidar nunca, tratando de contar con libros y relatos y toda oportunidad que se le presentase los acontecimientos sentimientos y demás hechos vividos, de las formas en que obligaban a matar a sus compañeros y la violencia que encarnaba todas las formas de muerte practicadas en los campos de concentración. La gran capacidad del 174517 no se puede tomar a priori, Tanto nazis como judíos y alemanes contribuyeron a la formación de aquel conocimiento que se sintetriza en el 174517. Termino que nos implica toda una ecología, no solo una idea nazi sino tambien practicas de distintos sujetos, victimas,victimarios, poder y demás que configuran el contexto de producción de ese pensar. Tomando a Puig de la Bellacasa “). thinking-with belongs to, and creates, community by inscribing thought and knowledge in worlds one cares about in order to make a difference – a diffraction. Nonetheless, the ways in which (a) difference is made here do not reside so much in contrasts and contradictions but in prolongations and interdependencies. Se ve como el conocimiento se crea en la interdependencia. Primo levi nececito del nacional socialismo y de la Alemania nacio para ser victima y el nacional socialismo nececito de las victimas para legitimar su régimen del terror, pero todo estas ideas que giran alrededor del 174517 son de mayor interés cuando plantean, como lo dice la cita, esas prolongaciones e interdependencias, la interdependencia victima y victimario en Auschwitz, supone aque conocimiento que desde la actualidad sos causa escosor y angustia de las deprevaciones humanas y el poder; es entonces cuando el 174517 teje una continuidad, pretendida por Primo Levi y sus memorias, continuidad que pretende mantener viva la memoria y sobretodo el miedo para que tales atrocidades no vuelvan a tener lugar en la historia.

 

Es interesante ver como de una poción Negativa Podemos Llegar reflexiones que no se quedan ancladas en el Contexto de configuración, sino que salen de ellos, reflexiones y conocimientos que avisan un futuro más próspero, pero con la memoria de un oscuro pasado. Condiciones y Contextos Que permiten el 174517 no solo permitieron unas Prácticas concretas de como el holocausto Judío, la reclusión en campos de concentración y la contante Innovación en las Formas de matar, sino, permiten en la actualidad la denuncia y la memoria de aquellos hechos e ideas que trajeron gran depresión al mundo. No se puede decir que  Auschwitz o el 174517 se quedaron en Alemania o en el pasado, ya que, estas se han Convertido en un Instrumento poético Que Trae la sombra, el de pensar en lo que sucedió; y es ese miedo que de una u otra forma vela para qué no se repitan hechos semejantes.

 

Referentes:

Puig de la Bellacasa, M. (2012). “Nothing comes without its world”: thinking with care. The Sociological Review, 60(2), 197–216. doi:10.1111/j.1467-954X.2012.02070.xMayo 12

Alexandra Merienne

Antropología Forense: actuar y pensar con precaución


Hace unos días encontré un video acerca del trabajo de reconstrucción e identificación de N.N narrado por la antropóloga forense Alejandra Quevedo quien trabaja en la Fiscalía General de la nación. Su trabajo se desarrolla en Cali una ciudad de rumba, de arte y de muerte en la que los fines de semana el número de muertes violentas se incrementa.

Esta antropóloga narra su trabajo a partir de la muerte y la violencia pues son estos dos elementos los que explican su intervención en aquellos restos humanos a los cuales les devuelve su historia y su identidad. Asegura que su trabajo es el encuentro entre la muerte y la vida y que la finalidad de su trabajo está dirigido explícitamente para la vida. En sus propias palabras:   

"La mayoría de los trabajos que se hacen cotidianamente, 
en el ir y devenir son a partir de la vida, son para la vida.
 El arquitecto construye, el educador forma,
 todo es para la vida y a partir de la vida, 
del movimiento, del dinamismo, del olor.
Este método de la Antropología Forense
 al que yo me dedico
es a partir de la muerte
intentar
más que dar vida 
devolver identidad"

(Alejandra Quevedo
Rastros y Rostros)

Este video lo relacioné con el texto "Working with Care: Experiences of Invisible Women Scientists Practicing Forensic" en el cual se describe el trabajo de la identificación de víctimas y las pruebas de paternidad que son realizadas en los laboratorios por mujeres científicas. Este me hizo evidenciar las prácticas y la ética de cuidado con las que trabajan estas mujeres cuando intervienen en los cuerpos y así mismo el compromiso que se tiene por hacer justicia.

"Y es que no es un favor que se le pide al Estado ni a la vida, es un derecho. La identidad es un hecho y un derecho" (Alejandra Quevedo)

El trabajo de cuidado y de compromiso de estas mujeres busca como finalidad la reparación tanto de la memoria de las víctimas como de sus familias y seres queridos. Este hecho lleva a que esos haceres forenses de tocar, manipular, preservar, mantener, pensar y resolver se vean afectados por sus emociones y sus sentimientos. Más sin embargo la culminación de estos trabajos genera una gran satisfacción al lograr sentir la utilidad de sus trabajos. 


"When I have many of these cases, I pray to God to make me an instrument of justice. 
To help me get the truth.’ 
Thus, in the daily reality of their work, 
the challenge is not only technical, 
but painfully emotional,
 as well as highly gratifying. "
( Perez,   )

El trabajo en la antropología forense requiere de un actuar con precaución, no sólo porque si la embarras las muestras pueden dañarse y tu podrías terminar en un problema jurídico, sino también porque se trata de la vida y la historia de una persona que por una variedad de razones ha sido reducida a ese cuerpo que tienes en las manos y que ahora clama por justicia para poder irse tranquilamente. 
Es por todo esto que el cuidado de pensar, de tocar y de sentir son parte fundamental de este quehacer.  

Esto me hizo pensar en la manera en que cuidamos de nuestro trabajo y de nuestros que-haceres en cuanto a las acciones de observar, tocar, pensar y sentir. Desde la Antropología siempre se está analizando la manera en cómo observamos, cómo intervenimos y nos relacionamos y así mismo qué sentimos de aquella experiencia. Me parece muy valioso e importante reflexionar acerca de esto, en clase cuando hablamos del afán antropológico sentí que muchas veces me he dejado invadir por él y he descuidado muchos elementos que podrían afinar mis conversaciones y relaciones con quienes comparto saberes. Dejemos tanto afán y cuidemos de nuestras palabras, de nuestros tactos no caigamos en la negligencia, actuemos con precaución.

Video: https://www.youtube.com/watch?v=onXvFjwd7fE

¿Cómo me convierto en Antropóloga?

En primer semestre vi la clase de Etnografía y Escritura, en esta clase la profesora Ana María Medina nos hizo varias invitaciones a pensar en la forma en la que escribíamos, qué prejuicios usábamos, cómo nos situábamos, etc..desde ese momento la invitación a la reflexividad a la hora de escribir fue aumentando en el pasar de los semestres. De esta insistencia me quedó que si me quería volver en antropóloga, debía, a la hora de escribir, pensar muy bien qué palabras debía usar y cómo las debía usar, con nuestras palabras y prejuicios no sólo configuramos nuestro mundo sino el mundo de los demás, la profesora Tania siempre insiste en "lograr ampliar el universo discursivo de los demás" esta frase ha quedado tan metida en mi cabeza que no puedo evitar pensar en que sólo la escritura de esta frase ya ha ampliado mi propio universo, veo a mi cabeza crecer cuando la escucho.
Como antropólog@s tenemos una responsabilidad extremadamente grande a la hora de escribir, e interpretado que al obtener el título se nos está confiriendo un tipo de autoridad para hablar de los demás y (lo pongo entre muchas comillas) "decir cómo funcionan las prácticas de una cultura", esto nos pone en una posición muy problemática porque se le está confiriendo a nuestras palabras y razonamientos la autoridad de hablar de los demás y así interferimos en la estructuración del pensamiento social. En la lectura de Pérez-Bustos (2014) hablan de las mujeres científicas que trabajan en el área de medicina forense genética, se nos habla de un espacio donde el mundo científico está masculinizado y trabajos como la genética forense se ha subvalorado siendo considerada una técnica más que una ciencia subvalorando implícitamente el trabajo de la mujer en la ciencia pues este espacio de genética forense está ampliamente ocupado por mujeres, la ciencia se muestra la mujer se invisiviliza. Ahí hallo un ejemplo de la responsabilidad tan grande que tenemos l@s antropólog@s por hacer una escritura justa de las situaciones, en el trabajo de la profesora Tania se habla de una "otra" invizibilizada, la mujer científica en esta área de cuidado.
Cuando nombramos a alguien que no ha sido nombrado, estamos ayudándo a su visibilización, Puig de la Bellacasa (2012) nos cuenta de implicaciones ético-políticas a la hora de producir conocimiento pues esto implica relacionar a unos otros y crear una imagen de su situación. Escribir como antropólogos requiere un particular cuidado, ¿cómo estamos nombrando a los otros? ¿Bajo qué intenciones los nombramos? ¿cuál es el objetivo de nombrarlo? ¿qué imagen estamos construyendo de ellos la nombrarlos? son cuestionamientos que me han quedado de los seis semestre que llevo estudiando, cada vez que escribo me siento con una terrible responsabilidad de hacer las cosas con cuidado, porque, así no sea aún una antropóloga, lo seré algún día y como ser humano, ante todo, debo tener respeto por los demás. Escribir es pintar realidades. Hacemos con las palabras imágenes del mundo e impactamos a los que nos leen con estas. Con palabras bordeamos y con palabras pintamos.


Puig de la Bellacasa, M. (2012). “Nothing comes without its world”: thinking with care. The Sociological Review, 60(2), 197–216. doi:10.1111/j.1467-954X.2012.02070.

Pérez-Bustos, T., Olarte Sierra, M. F., & Diaz del Castillo, A. (2014). Working with care: 
experiences of invisible women scientists practicing forensic genetics in Colombia. In 
E. Medina, I. Marques, & C. Holmes (Eds.), Beyond Imported Magic: Studying 

Science and Technology in Latin America. (in press). Cambridge, MA: MIT Press. 

PENSANDO CON CUIDADO EL APRENDIZAJE FOTOGRÁFICO.

De: Francisco Javier Bernal Guevara

Recientemente me integre a un blog de Facebook que se llama “fotografía para principiantes”, este blog, cómo su nombre lo anuncia: trata de enseñar a las personas que no tienen conocimientos previos en fotografía, pero si muchas ganas de adquirirlos, conocimientos sobre los diversos usos, herramientas, programas de edición, formas de captar la imagen (ángulos, encuadre o etc…) y ti
pos de cámaras. Todo tipo de información para saber aprovechar más las opciones que dan las cámaras y sacar fotografías más acordes al gusto del fotógrafo.

Este grupo mantiene una serie de reglas para su funcionamiento: Cada persona solo puede subir una fotografía con sus datos “exif” que son el conjunto de datos concernientes a la información de cómo ha sido tomada la foto (velocidad de obturación, iso y etc…), de igual manera, las personas son libres para preguntar en lo concerniente a cualquier duda sobre fotografía, también se invita a comentar y complementar las fotografías de los demás, recomendando pautas para mejorar el resultado de los próximas fotografías o simplemente la gente comenta si le gusto y pon el popular “like” a la foto:

“Creo que le hace falta mucha más velocidad, Y reconsiderar el encuadre.
 “Hermosa foto!!! Me encanta.”

Las fotografías difieren en temas, en estilos, en encuadres y técnicas e incluso en el sentido y valor de la foto y lo que ésta representa para la persona, más allá de si esta está “bien tomada” o no. Por lo que es recurrente, fotos tomadas por diversidad de cámaras y en diversidad de lugares, personas y ambientes; desde una toma casual, por el celular en  una fiesta, como a un paisaje en la soledad del itinerario del aventurero o el trabajo de un profesional:

 “la sonrisa de mi abuela no tiene precioJ
“… Alpaca”
“Moto GP Argentina 2014”

"Chica Ruda" de David Larrea Alvia
La página de Facebook está apoyada en otro blog, en el que se trata de explicar de maneras fáciles y sencillas diversas técnicas y procesos de la cámara. Así como también hay, una extensa colección de artículos relacionados con cada tema a tratar, que son colgados por el mismo administrador de la página, para facilitar el proceso de aprendizaje.

Pensando con… cuidado

Debido a que el acto de tomar una fotografía y subirla no solo plasma el interés por participar en un blog de fotografía y aprender sus cánones, sino de retratar un lugar, una persona y un momento que son importantes para la persona y que la afectan emocionalmente, estoy de acuerdo con Bella Casa (2011: 99) en que debemos “des objetivar lo objetivado” , haciendo evidente las relaciones complejas de afecto y cuidado, que se dan entre el que toma la foto y al que le toman o a lo que se le toma la foto, por mediación de objetos como la cámara. En este sentido tomar fotos implica “re-affecting objetcfied worlds” (ibid: 97) ya que implica no solo aprender a tomar la fotos sino relacionarse de una especial manera a lo que se desea retratar.

Fotografía Fácil 
Es precisamente por el reconocimiento, de que para tomar una foto no solo se necesita los conocimientos para manejar una cámara, sino participar en los lugares, con las personas o animales y con las condiciones de luz, de tiempo y etc… Y también de una comunidad en donde compartir estas y aprender conjuntamente; que pienso que este blog de fotografía piensa con los otros en tanto reconoce que es justamente esta diversidad de relaciones entre la cámara, el mundo y los seres retratados (o cosas) que la da potencial de aprendizaje a la comunidad y a cada uno:

“What i find compelling in fostering a style of writing-with, is not who or what aims to include and represent in a text, but what it generates: it actually creates collective, it populates a world.  Thinking-with makes the work of thought stronger, it support its singularity and contagious potential” (Puig de la Bella casa, 2012:203)

Sin embargo, y siguiendo a Bella casa pienso que pensar con los otros también implica disentir con ellos, en el sentido de que, para poder aprender a expresar por medio de la fotografía lo que queremos retratar, debemos estar abiertos a reconocer nuestras vulnerabilidades en la utilización de los medios fotográficos (ibid:206), que personas con más experiencias en los fotografías que nos interesan, pueden complementar, no para demostrar la superioridad de sus fotos sino para ayudarnos a elaborarlas más acordes a lo que queremos retratar.

Debido a esto, el pensar con y el disentir con, también implican la apropiación de ciertas prácticas concretas cotidianas que cuiden  según Bella casa (2010: 163, 164,165) el proceso de fotografiar, que implican un “quehacer cotidiano” cómo el apropiarse y practicar diariamente las funciones de la cámara, contextualizado en tanto para cambiar sus propiedades se debe tener en cuenta las condiciones de luz u oscuridad y afectivas en tanto lo que quiero representar me importa y me relaciono con él.

En síntesis, el grupo se vuelve una manera en que todos aprenden a  fotografiar en la medida que aportan y se comentan mutuamente, pero también permite aportar desde las distintas maneras en que cada uno se relaciona con la fotografía y lo fotografiado, mostrando como el grupo es un espacio que piensa cuidadosamente las distintas maneras en que cada uno se aproxima a la fotografía y trata amplificar estas potencialidades, sin desconocer las diferencias.


 BIBLIOGRAFIA
·         Puig de la Bellacasa, M. (2011). Matters of care in technoscience: Assembling neglected things. Social Studies of Science, 41(1), 85–106. doi:10.1177/0306312710380301

·         Puig de la Bellacasa, M. (2012). “Nothing comes without its world”: thinking with care. The Sociological Review, 60(2), 197–216. doi:10.1111/j.1467-954X.2012.02070.


·         Puig de la Bellacasa, M. (2010). Ethical doings in naturecultures. Ethics, Place & Environment, 13(2), 151–169. doi:10.1080/13668791003778834
Conocimiento con cuidado

Siendo  mujer, estudiante de antropología y profesional en formación, son varios los intereses y encuentros sobre el que hacer antropológico y la producción de conocimiento que están en juego. Vemos que existen diferentes formas de obtener y dar cuenta de ciertos datos  dentro del trabajo teórico y de campo. En mi caso, algunas veces pienso en la forma como estoy pensado y dando cuenta de una realidad concreta. Pensar en esto, implica también un acercamiento al cuidado desde el conocimiento, donde doy cuenta de mi misma y las personas con las que trabajo en campo y diariamente.

Puig de la Bella casa nos dice que “That knowledge is situated means that knowing and thinking are inconceivable without a multitude of relations that also make possible the worlds we think with.The premise to my argument can therefore be formulated as follows: relations of thinking and knowing require care” (2012: 2). En campo, considero clave entender que el saber y el conocimiento no se construyen desde un lugar, sino que las relaciones y diferentes visiones sobre un tema son importantes a la hora de pensar cuidadosamente. Por ejemplo en una de mis salidas de campo a Nariño, fue importante comprender que conocer a las personas y entablar relaciones con ellas era necesario a la hora de adquirir cierto conocimiento en campo, pues existía una relación de interdependencia entre las personas que allí se encontraban y nosotros como estudiantes; el conocimiento y el hecho de conocer implicaba e implica relaciones que deben ser cuidadas y cultivadas.

Durante mi estadía en Nariño fueron varias las personas que conocí haciendo campo, don Anibal Osejo (habitante de San Pedro de Huaca) por ejemplo, fue una de las personas que, ahora que pienso, daba cuenta de cierto tipo de conocimiento adquirido por sí mismo y expresado de forma diferente. Don Anibal tiene aproximadamente 90 años de edad y su conocimiento sobre el pueblo y el lugar donde vive da cuenta de un ejercicio preciso, pues sus datos eran tan exactos y detalladamente descritos, que a la hora de comunicarlos iba más allá del simple hecho de contar datos; su experiencia era fundamental. Sus expresiones, tranquilidad al hablar y el conocimiento que este señor tenía, lograba capturar toda mi atención durante la charla. En este sentido comparto lo que Puig de la Bellacasa (2009) y Precarias a la Deriva (2004) nos dicen “I conceive public communication of science as a caring practice, I understand communication not only as a tool for diffusing information, but as a collective initiative to create bonds and common grounds upon which to build the present and the future” (Perez-Bustos. 2014:1). Mi experiencia con Don Anibal fue interesante en el sentido que me permitió conectarme con lo que decía y comprender que el conocimiento va más allá de una producción escrita, grafica u oral, pues somos seres de relaciones que dependemos colectivamente unos de otros hasta en el conocimiento y producción del mismo.

Comúnmente se piensa que el conocimiento y la manera en que lo expresamos se ve trazado por la neutralidad y objetividad en el trabajo de campo y la producción final. Sin embargo, el hecho de pensar de manera cuidadosa y ser consientes que el cuidado implica un hacer específico como escribir o escuchar y que este a la vez involucra ciertas relaciones puestas en campo, permite cuestionar dicha neutralidad u objetividad del conocimiento científico y social. “Caring in this context is both a doing and ethico-political commitment that affects the way we produce knowledge about things. It goes beyond a moral disposition or wishful thinking to transform how we experience and perceive the things we study” (Puig de la Bellacasa. 2011:100). El conocimiento en mi caso y todos los casos va más allá de hacer, pues implica pensar en mi posición como investigadora que tiene ciertas implicaciones y disposiciones políticas y éticas a la hora de pensarme en campo. Mientras estaba en Nariño, esta reflexividad era constante, sin embargo era complicado dar cuenta de ella, pues como investigadora muchas veces no soy consciente de cuál es mi papel en el campo. Es claro que la manera de entablar vínculos con las personas y acercarme ellas pasa por mi experiencia  y mi disposición, donde la producción y obtención de conocimiento se ve trazado por un encuentro con los demás, por un devenir (Haraway, 2008. Citado por Perez-Bustos, 2014:5) que me sitúa como persona dentro de dos campos: El campo de conocimiento y el campo diario de trabajo.

Así pues, no se trata solo de ir a Nariño o cualquier otro lugar, sino de comprender que mi posición como estudiante o investigadora afecta la manera en que interactuó con las personas, siendo el conocimiento precisamente eso: una forma de interactuar, comunicar y entablar relaciones con quienes conozco y a la vez no, pues a la hora de producir, publicar o dar a conocer un producto, el cuidado como “a situated practice through which collective interdependence is performed” (Perez-Bustos.2014:2), es una dimensión interesante dentro de nuestro que hacer antropológico, social y cotidiano. 

Bibliografía

Puig de la Bellacasa, M. (2011). Matters of care in technoscience: Assembling neglected things. Social Studies of Science, 41(1), 85–106. doi:10.1177/0306312710380301

Puig de la Bellacasa, M. (2012). “Nothing comes without its world”: thinking with care. The Sociological Review, 60(2), 197–216. doi:10.1111/j.1467-954X.2012.02070.


Pérez-Bustos, T. (2014). Of caring practices in public communication of science: Seeing through trans-women scientists’ experiences. Forthcomming in Signs: Journal of Women in Culture and Society.

lunes, 5 de mayo de 2014

Cuidado de Objetos


El cuidado de los zapatos: Embellecer el calzado o darle una segunda vida

“Tengo mi casa en un zapato
 
zapato viejo y de rebaja
Tengo mi casa en un zapato
que me la hizo un Zapatero
Te quiero más que a mi zapato viejo
zapato viejo”

(Canción ManuChao)


Las personas caminan y caminan con sus zapatos viejos o nuevos. Se movilizan por las calles de la ciudad gris. Caminamos por el cemento, por los parques de pasto verde y por pisos brillantes de mármol o madera. Caminas con rápidez o con lentitud, todo depende del ánimo, del tiempo y del ritmo que lleves. En la ciudad se camina con zapatos y es por eso que allí encontrarás toda una variedad de zapatos de colores, tamaños, adornos, materiales y usos diferentes. Caminas y tus zapatos se adhieren a tus pies, se transforman con tus pasos y se deforman con tu caminar chueco.
how we wear one another and how we wear out.”
(Minddleton, 2012:8)
Todos los días miles de zapatos caminan por las calles de Bogotá. Pensando en el cuidado de las cosas nos causó curiosidad investigar qué sucede con estos objetos. Nos preguntamos entonces cómo se cuidan los zapatos, qué cuidados se les pueden dar y qué alternativas existen para prologar la vida y el tiempo de estos. Para encontrar respuestas a nuestras preguntas decidimos caminar con nuestros zapatos por varias calles de la localidad de Chapinero de Bogotá. En el camino nos topamos con dos alternativas y caminos específicos para el cuidado y el uso de zapatos. El primero se refiere a las prácticas de los lustrabotas quienes con sus manos embellecen los zapatos, y la segunda las prácticas que se generan en torno a la compra-y-venta de zapatos usados.  En el primero es precioso evidenciar las prácticas por cuidar, reparar y mantener mientras que el segundo se basa en darle una segundo ciclo de uso al calzado con lo cual ambas prácticas desafían las leyes de la obsolescencia programada.  


Embellecer el Calzado


“¿Sabe cuál es el colmo de un embolador?
Que la mujer llegue a la casa
con los zapatos embolados
(Palabras de Guillermo, el lustrólogo)

En las prácticas relacionadas al cuidado de los zapatos, nos encontramos con el trabajo de los lustrabotas quienes “embellecen el calzado”. Conocimos a Guillermo, un hombre que se describe a sí mismo como un lustrólogo que estudia en la “universidad de la vida”. Este hombre tiene 72 años de los cuales 46 de ellos ha dedicado al trabajo de lustrabotas. Nos cuenta que siempre ha trabajado en la misma esquina:“Yo aquí soy el Rey de la cuadra, hasta tengo guardaespaldas”. Guillermo tiene una caja amarilla en la que se sienta y dentro de la cual guarda sus cepillos y betúnes, otra caja en la que se posan los zapatos y otra mucho más grande y alta en la que el usuario del zapato toma asiento.

Una de nosotras se decidió a lustrar sus zapatos, jamás lo había hecho pero se aventuro a tomar asiento, posó sus zapatos en el cajón que la separaba del lustrabotas y comenzó a conversarle. Lo primero que hizo Guillermo, el lustrabotas, fue pasar un cepillo por todo el zapato para quitarle el polvo de encima. Luego utilizó un betún incoloro, unas gotas de agua y cepillo cada zapatado. Enseguida tomó un betún café con gotas de agua y nuevamente cepillo. Para finalizar engraso de nuevo las botas con otra capa betún incoloró que la cual le dio un brillo reluciente. “Nunca vi brillar tanto mis zapatos como hoy.”

Guillermo nos contó que todos los días se le presentan zapatos para lustrar tanto de hombres como de mujeres: “la gente viene para que yo emebellezca sus calzados”  nos dice Guillermo con una sonrisa en la boca. Mientas conversamos con él aparecieron otros clientes quienes en menos de 5 minutos le daban un brillo a sus zapatos gastados. Otros se le acercaban a Guillermo y le pedían consejos para el lavado de sus zapatos de gamuza o de cuero, el les daba indicaciones y les ofrecía sus servicios. Así mismo fue inevitable no fijarnos en los propios zapatos de Guillermo, estaban usados sí, se les veía el desgaste, la deformidad, el de-colorido pero eso sí tenían ese brillo que Guillermo le da a todos los zapatos que pasan por sus manos.
  

FOTOGRAMA LUSTRADOR DE ZAPATOS:



Compra-y-venta de Zapatos usados



El otro camino que recorrimos nos llevó a visitar varios negocios de Chapinero bajo en los que se practica la compra-y-venta de zapatos usados. Alrededor sucedía algo curioso, una cuadra antes de llegar a los locales nos encontramos con unos zapatos tirados en el piso que llamaron nuestra atención y curiosamente encima de estos, en un cable de luz colgaban un par de zapatos. Tratamos de indagar sobre el significado pero no tuvimos respuestas concretas. Seguimos nuestro camino.

En  cada negocio que visitamos era posible encontrar una variedad de tipos de zapatos: botas, tennis, mockasines, zapatillas,sandalias, botines, tacones etc. Los zapatos se exhiben en repisas o canastos y los hay de todos los precios. Este, el precio, varía según el estado de uso que tengan los zapatos por lo que oscilan desde los 20mil pesos hasta los 100mil pesos. Los que tienen el precio más alto son “nuevos” según los vendedores, sin embargo es posible ver ya en sus suelas un uso precedente.

Algo que nos causó curiosidad fue el estado de limpieza en el que se venden estos zapatos. Algunos han sido desempolvados mientras que otros se ven bastante sucios y deseteñidos. Le preguntamos a uno de los vendedores sobre la limpieza de los zapatos y nos dijo “ ah no, eso sí te toca a ti limpiarlos” mientras que otro nos aseguro que sí los limpiaba y arreglaba. Tambien averiguamos sobre la venta de zapatos que allí se realiza. Según uno de los vendedores:

La gente viene  aquí a vender sus zapatos para no botarlos a la basura y también para hacerse la platica que hace falta, en vez de ir a la basura pasan a ser de otra persona que también los necesita más baraticos que los que venden en los centros comerciales que ahí sí le salen a usted bien caros.”



Fotograma  Camino a la compra-venta de zapatos:




Reflexión

Si reflexionamos acerca de la relación que se genera entre los humanos con lo no-humano, en este caso específico con los zapatos, es evidente que existen varias formas de usarlos. Algunos se preocupan por su imagén, por la distinción de su estatus por lo que cuidan el brillo de sus zapatos, otros preferimos pasar por “descuidados” y “caminantes” por lo que andamos con los zapatos llenos de barro, muchos otros cambian de zapatos todos los días mientras que algunos solo tienen un par.  Los zapatos son un bien material lo que nos explica:

“how our things might encourage us
to look after them and respect their materiality.”
(
Minddleton, 2012; 9)

Y así mismo es posible evidenciar que estos objetos tienen agencia y poder. Los zapatos hablan por sí solos, nos hablan de nuestros caminos, del cuidado que les damos, de distinciones, de la manera en que caminamos y de cómo nos envejecemos y nos deformamos con ellos. Por otro lado surge el deseo, porque estos objetos también nos seducen y esto se hace evidente cuando soñamos y deseamos tener un par de zapatos como esos que lleva tal persona.

“Things seduce the humans around them with their little-understood dominion of thing-power.”
(Edward, 2006; 10)



El otro punto importante en esta reflexión tiene que ver con cómo podemos desobedecer las leyes de la obsolecencia lo cual nos llevo a esos dos caminos que ejemplificamos anteriormente. El hecho de “embellcer” nuestros zapatos, de darles un mantenimiento y un cuidado generan una prolongación temporal de los zapatos. Así mismo el hecho de encontrar lugares en los que compran y venden zapatos usados nos da una idea de las resistencias que se pueden dar para re-usar y  reciclar estos objetos.

Sin duda alguna prolongar la vida de los zapatos, hacer que vivan más, requiere de esfuerzos y acciones relacionadas con el cuidado. A partir de esto se generan otras maneras de cuidar no sólo hacía nuestros zapatos sino al planeta tierra pues el consumismo, las leyes de la obsolencia y ese usar-y-tirar generan más basura, más contaminación, teniendo en cuenta además el poco cuidado ambiental y social que tienen las explotadoras fábricas masivas de zapatos. Es por esto que el cuidado de los zapatos puede incluso llevarnos al cuidado de la vida  y generar un manifiesto anti-catastrófico.

Admittedly, the challenges of making matter last will become more gripping over time but caring for things is a rewarding, non-confrontational and genuinely anti-catastrophic act.
It is common sense. It is art. It is a cautionary tale. It is a new materialist manifesto, ubicomp’s new mission to make nonhuman matter matter to humans.
(Minddleton,2012:19)
Bibliografía
  1. Edwards, C. (2006). “Home is Where the Art is”:: Women, Handicrafts and Home Improvements 1750-1900. Journal of Design History, 19(1), 1121. doi:10.1093/jdh/epk002

    Middleton, J. (2012). Long live the thing! Temporal ubiquity in a smart vintage wardrobe. Ubiquity: The Journal of Pervasive Media, 1(1), 722. doi:10.1386/ubiq.1.1.7_1