Para
este ejemplo quise buscar algo que estuviera alejado de la corporalidad y lo
que implica el cuidado dentro de la misma y me quise centrar en otro tipo de
cuidado. Viendo todo lo que está ocurriendo con los campesinos colombianos
pensé en lo importante que es cuidar la tierra y esto me llevó al cuidado del
medio ambiente. La tierra ha sido utilizada por el hombre desde hace siglos y
el mal uso que se le da a esta más la explotación indistinta de los recursos
por parte de la sociedad, ponen en riesgo la vida de la tierra y el medio
ambiente como lo conocemos.
El
uso indiscriminado de los recursos naturales o las nuevas técnicas de siembra,
que además les son impuestas a los campesinos, son factores de gran importancia
que debemos tener en cuenta. Creemos que los recursos naturales son inacabables
y los hemos usado indiscriminadamente para vestirnos, comer, divertirnos; y
aunque esto no está mal, factores como la sobrepoblación y la falta de
conciencia al momento de consumo hacen del cuidado del medio ambiente algo cada
vez más difícil.
Buscando
un ejemplo específico para esta temática que estoy tocando, me puse en la tarea
de buscar imágenes y me percate de algo muy curioso pero que pensándolo un poco
tiene mucho sentido. La gran mayoría de las imágenes, por no decir todas,
tienen a los niños como protagonistas de cuidado. Es esa nueva de generación
que debe crecer con el chip del
cuidado del medio ambiente. Esto es muy paradójico ya que cada vez con la
tecnología y el acceso a otros mercados, la comida chatarra, entre otros para
estos niños esto se hace mucho más difícil. Pensé entonces en una película y de
inmediato se me vino “El Lorax” a la cabeza; es la historia de cómo se
desaparecieron los árboles de la tierra y de un niño que hace lo imposible por
conseguir un árbol en un mundo en donde ahora toca comprar el aire en botella.
Mi
ejemplo entonces va dirigido entonces a ese tipo de cuidado, ese cuidado que
hemos dejado de lado ya que damos por sentado la existencia y durabilidad de
los recursos naturales. También es importante que si tenemos la oportunidad
apoyemos ese cambio de mentalidad en los niños y así podamos educar a las
futuras generaciones con una mayor conciencia sobre el medio ambiente y lo
importante que es esto para que en un futuro no pase lo mismo que con el agua y
nos toque comprarlo en botella.
Hay cuestiones de fondo en este tema propuesto por Camila. En primer lugar tendríamos que peguntarnos ¿que queremos enseñar o transmitir a nuestrxs niñxs? y luego ¿cómo podemos hacer para lograrlo?.
ResponderEliminarEn primer lugar si queremos que haya una consciencia y una responsabilidad]/obligación basada en "la huella ecológica", en las formas en que lxs niñxs piensan y se relacionan con el medioambiente, creo que debemos optar por los consejos de los abuelos; "dar ejemplo"( pero no para que nos imiten, sino porque nuestras prácticas son el resultado de lo que pensamos).
Eso implica que primero mostramos a lxs niñxs mediante nuestra experiencia cotidiana con el mundo que nos rodea; separar las basuras, no llevar a la mascota a evacuar a los parques, no desperdiciar ni comida ni objetos, sembrar, obtener por lo menos cilantro usarlo en lo que comemos, para que lx niñx vea el proceso y comprenda la importancia de las plantas y los recursos que tenemos. A la vez que hacemos las cosas explicarles por qué razón se hacen de cierta forma y no de otra. Mostrándoles que el mundo está habitado por otros y que tenemos relaciones directas o indirectas con ellos, y de estás con el medio ambiente.
Estas son labores que como hemos visto requieren mucho trabajo y dedicación, tanto así que los padres "no tienen" tiempo para dedicarles a sus hijos, y deben contratar (una buena parte lo hace)a otra persona que se encargue de hacerlo.Pero esta es otra de las formas en que el sistema capitalista ejerce violencia sobre nosotros. No podemos dejar de trabajar, pero entonces nuestros hijos requieren tiempo que es dado por otra persona, a la cual no podría pagarle sino trabajo; y así es un ciclo vicioso que no acaba. Entonces pienso que esta consciencia en los niños no puede ser sólo impartida como un curso más en sus programas escolares, sino que debe ser una forma de vida, la cual a su vez no es del todo posible, si no optamos por alternativas que permitan que los padres y los hijos pasemos más tiempo juntos o por lo menos que el poco tiempo que haya sea de calidad (que, la mayoría de veces, por la sobrecarga laboral es muy escaso.
A mí me parece muy interesante el ejemplo de Camila por el mismo contenido de la película, pues efectivamente muestra un panorama desolador para los niños entorno al uso de los recursos naturales, que si bien lo hace de una manera “animada”, también propone grandes reflexiones al respecto, considero que eso que anota Camila respecto a la idea de inscribir a los niños dentro de proyectos que cuidan el medio ambiente en los que se busca procurar vender una imagen de cuidado y sostenimiento es importante, en tanto que propone pensar en las dimensiones a largo que plazo que en ultimas podrían tener toda acción u oficio de cuidado, pues efectivamente esto demuestra que no cuidamos en una sola vía o en ciertos momentos, pues estos mismos cuidados en torno a la naturaleza, los recursos naturales, las personas y demás también suponen una larga duración y unos resultados a largo plazo que nos dan cuenta en ultimas de los propósitos del mismo acto y de la importancia de lo colectivo a la hora de construir una idea de cuidado y de procurar realizarlo de manera que sea efectiva.
ResponderEliminarAdemás de ello me parece importante también pensar, en lo que propone Daniela con su ejemplo de los pescadores, en cuanto a la relación de lo humano y lo no humano en tanto que efectivamente esa relación interdependiente que sugiere el hecho de que para que sobrevivamos tenemos casi que por necesidad matar o destruir a otros se vuelve cotidiana y casi imperceptible, y creo que el ejemplo de Camila lo deja ver claramente, pues tomamos todos los recursos que la naturaleza nos regala creyendo que no existe una vida de por medio allí y la utilizamos a nuestro acomodo, sin pensar si esta sufre o no, para luego entrar entonces a plantear una reflexión desde la niñez acerca del cuidado y de la inconciencia que los adultos manejan al respecto, punto que también me parece importante y es que este tipo de películas generan espacios para pensar entonces si es posible que un niño genere más conciencia ambiental en este caso y genere un cuidado por si solo o gracias a este tipo de ejemplos y aquí me parece relevante lo que propone Jissel acerca del “dar ejemplo”, pues es claramente evidente que en últimas son los padres o las personas adultas quienes dan el ejemplo y quienes deben procurar buscar herramientas y maneras de que los otros aprendan y comprendan que cuidar no se da exclusivamente entre seres humanos sino que hay otros espacios en los que la vida también está presente.