martes, 24 de septiembre de 2013

Pensando la ciudad, me encuentro reflexionando  sobre un  pequeño y olvidado barrio al sus oriente de Bogotá llamado El Triunfo.



Este barrio tiene varias particularidades que lo hacen ser único tanto para sus habitantes como para quienes lo miramos desde afuera.

Primero que todo la formación y configuración de El Triunfo nace de un sueño desarticulado o ignorado por los planeadores urbanísticos que tenían la batuta de pensar y ordenar a Bogotá en los años 80. El ambiente  en el que nació este sueño transcurrió en otro lugar llamado Las Malvinas, otro barrio de Bogotá que en términos genéricos ha sido identificado como “invasión” por sus características de ocupación ilegal, falta  de servicios públicos  y edificación en materiales poco resistentes y eficientes. De aquí emergió Aladino Ospina, ciudadano que deseaba mejores condiciones de vida para él y su familia.



Trabajando por aquel sueño Aladino encontró la posibilidad de comprar un terreno para construir un hogar, sin embargo quien vendia ese terreno no le venderia una pequeña parcela, debía comprar una gran porción de tierra y él solo no podría pagarla. La solución fue crear una asociación entre varias personas provenientes de distintas locaciones de Bogotá o Colombia con el mismo sueño, tener un hogar propio.

Así que fueron reunidos dineros y esfuerzos por comprarle el  terreno al gran  hacendado y posteriormente divididos en partes iguales y se acordó construir, sin importar las circunstancias, en ladrillo o cemento mínimo una habitación, baño y cocina, pues aquí no se repetiría el mismo escenario que en Las Malvinas.  Sin embargo la lucha no termina allí, lidiar con politiqueros que se inmiscuyeron en el proyecto, legalizar los predios, la construcción del salón comunal, el acceso a los servicios públicos y en sí el reconocimiento por el distrito de que ellos estaban allí y allí se iban a quedar fue todo un trajín al que se enfrentaron los primeros habitantes de este barrio.

Diego Barajas y Camilo García  podrían encontrar que lo que aquí se construyó fue una atmosfera imaginada  que “tiene que ver con el concepto de imaginación de Arjun Appadurai, …  como una  herramienta que nos permite crear vínculos sociales, redes de colaboración, o proyectar nuevos escenarios en colectivo y alternativos partiendo de lo existente (Barajas & García, 2012:21).  Aunque cada familia luchaba por su sueño particular, estos convergían  y los llevaban todos a organizarse y trabajar  por un mismo fin, aportando cada quien de sus saberes y experiencias previas y a la vez aprendiendo a relacionarse con los entes gubernamentales y prestadores de servicios.

Se trabajó por un elemento que para ellos, y muchos de nosotros,  podría encontrarse dentro de lo vital. En este caso es un techo fuerte sobre el cual crecer con la familia.
Sin embargo, simultáneamente  que se desarrolla  y establece El Triunfo, a su alrededor se esta instaurando una figura de conservación ambiental hoy conocida como el Parque Distrital de Montaña Entrenubes. 

Entonces la lucha del Triunfo no ha terminado aquí, pues ahora aparece como un intruso en un lugar “natural” que debe “conservarse”  siguiendo los canones de conservación primermundista en los que se piensa que para la conservación de lo natural el hombre debe  desligar su accionar de la zona a conservar. Sin embargo los habitantes del barrio previamente habían construido una relación de afecto con el terreno hoy denominado como Entrenubes, pues desde niños algunos hombres y mujeres solían jugar correr en el “potrero” cercano a su casa, colgar lazos en los arboles y saltar, aunque también había quienes llegaban a la casa sin zapatos por de perderlos dentro del barro; otros corrían  para llegar temprano a la casa por miedo  al atraco pues fácilmente los malhechores se escondían entre el pastizal a esperar sus victimas.   

Por tal razón, pensando  el caso de El Triunfo desde lo que nos proponen Barajas y García en su texto de Arquitecturas de los afectos y los imaginarios y su posible papel en la construcción de condiciones ecológicas de la biodiversidad (2012),  podemos encontrar que lo que esta ocurriendo en este espacio de la ciudad  (teniendo en cuenta que sucede en  muchas otras partes) es que se ha ido construyendo un ecosistema en el que se han creado vínculos entre humanos, construcciones por humanos, naturaleza e instituciones, creando así un ambiente biodiverso y   

Con respecto al concepto de biodiversidad también nos parece muy importante indagar sobre cómo puede ayudarnos a repensar otro concepto fundamental: el de democracia, ya que al referirse al reconocimiento de formas plurales de vida, la biodiversidad implica fundamentalmente formas plurales de imaginar y de construir el mundo y, asimismo, formas plurales de gestionar el poder. (Barajas&García, 2012:7)

Entonces, nos encontramos con un barrio que, aunque geográficamente parece estar aislado del resto de la ciudad, pues pocas vías de acceso tiene y como vimos, rodeado por el parque está, pero que debio aprender a congregar deseos  y opiniones para organizarse y establecerse a como esta hoy, y continuar con sus luchas y motivaciones.

Bibliografía:

Barajas, D., & García, C. (2012b). Arquitecturas de los afectos y los imaginarios y su posible papel en la construcción de condiciones ecológicas de biodiversidad. In B. Lleó (Ed.), Aproximaciones a la Investigación en Arquitectura (Nobuko.). Buenos Aires.

2 comentarios:

  1. El ejemplo Laura muestra como en condiciones de marginalidad y precariedad material: ausencia de servicios básicos y de condiciones habitacionales dignas; las personas por medio de una coordinación de esfuerzos individuales intentan darle solución a estos problemas sociales estructurales.
    Estos problemas sociales son estructurales debido a que la configuración actual de los Estados neoliberales implican una estado de inseguridad social, en donde se defienden los intereses del capital en detrimento del bienestar de las personas. En este sentido, en estos Estados la pobreza aparece como asunto de cada quien y no como responsabilidad estatal, incluso los pobres aparecen para el Estado neoliberal como una potencial amenaza y su accionar como Estado punitivito y policial es castigarlos, tal como afirma Loic Wacquant. Así, el actual Estado neoliberal desempeña prácticas por acción u omisión de no cuidado en la medida en que su centro no es asegurar las condiciones para que la mayoría viva tan bien como sea posible, ya que ni siquiera puede contribuir en lo mínimo para ello que son condiciones habitacionales dignas.
    Viendo entonces lo que Laura nos narra frente al drama de familias que venían de un barrio de invasión y con condiciones habitacionales precarias, ellos mismos toman la iniciativa de asociarse, comprar un terreno y construir sus hogares y un barrio, para vivir mejor. Esto implica un establecimiento de lazos y de compromisos recíprocos, que conllevan a una acción colectiva que permita dar soluciones a los problemas estructurales que causa un Estado de inseguridad social y de no cuidado, ya que son las mismas personas las que tienen que construir, sin más apoyo que el de sus redes, sus casas, espacios comunitario e incluso carreteras (tal como muestra Laura en sus fotos y descripciones del proceso del barrio); y como si esto fuera poco, gestionar ellas mismas la legalización del barrio y el acceso a servicios públicos.
    Resulta además muy interesante del análisis de Laura, un elemento que ella resalta y es como las políticas de conservación ambiental terminan afectando todos los esfuerzos colectivos de la gente del barrio de El Triunfo, vemos acá en este caso como el cuidado de lo naturaleza no humana que tanto se celebra termina afectando a poblaciones marginadas que han tejido sus lazos de cuidado ellas mismas. Vemos así una contradicción, el Estado que no apareció para mejorar las condiciones de vida de las personas que ahora viven en El Triunfo, aparece ahora con una política verde que afecta la manera en que las personas solucionaron relativamente sus ausencias.

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  2. hola soy mauricio y vivo en el triunfo desde hace 28 años y estoy muy orgulloso de vivir alli, gracias a nuestro lider Akadini Ospina. que buen reconocimiento al barrio. que bueno seria tomar unas imagenes de como se ha desararollado y ahora sus calles son pabimentadas. muchas gracias.

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